Con todo esto, es obvio que una instalación domótica aporta comodidad, bienestar y tranquilidad a cualquier hogar. Si del gas se trata, con la domótica asimismo podremos implementar sistemas de control para detectar y informar en casos de averías como, por poner un ejemplo, una fuga de gas que pueda provocar un corte del suministro y así eludir peligros.
A modo de dato, es esencial destacar que, según el IDAE, las familias somos responsables del treinta por cien del consumo total de energía del país, con lo cual,reducir dicho impactodepende de nosotros de manera directa. Eso por un lado, pero es que también hay que charlar de que, por norma general, la domótica tiene por objetivohacer la vida más simple al usuarioy, sobre todo, másconfortable. Dicho bienestar viene generado por poder regular lailuminación, subir y bajar las persianas o bien los toldos, encender el aire acondicionado o bien la calefacción, etcétera Y hay que incluir el factorseguridad, otro de los bienes más preciados que la domótica nos puede asegurar también, controlando las puertas de acceso y los interiores a través de alarmas, detectores y simuladores de presencia, contando con teleasistencia médica, entre otros.
El sistema se puede controlar desde dentro y desde fuera del inmueble y está compuesto por una serie de redes interiores y exteriores de comunicación que pueden ser inalámbricas o no. Desde un control remoto o desde tu propio Móvil inteligente puedes administrar todas las actividades o tareas del hogar. Puedes controlar la temperatura, luces, seguridad y controlar los electrodomésticos.
Se puede adaptar el nivel de iluminación en función de la variación de la luz solar o la zona de la casa. Además, cuando no haya absolutamente nadie en casa, podemos garantizar que las luces estén apagadas o bien la temperatura de la climatización en modo ahorro para optimar su uso. Para convertir nuestro inmueble en un sitio inteligente es necesario tener lo que se conoce como pasarela residencial. Este es el dispositivo que administra todas las redes de una residencia al conectar todas las infraestructuras de telecomunicaciones a Internet.
De este modo, los habitantes de la casa dismuyen sus costos energéticos de forma permanente y aumentan al tiempo el confort del hogar. La domótica es elconjunto de tecnologíasaplicadas al control y laautomatización inteligente de la residencia. Con esto se deja una gestión eficaz del empleo de la energía que revierte en un mayor confort en el hogar y en un aumento de la seguridad. Hablamos de supervisar y/o regular, por servirnos de un ejemplo,la calefacción, las persianas y toldos, la alarma, la iluminación, el portero automático, etcétera Los llamados ‘hogares inteligentes’llevan tácita una (r)evolución constante e in crescendo, como la propia naturaleza tecnológica a la que responden.
No solo luz o gas, también podemos ahorrar agua gracias a los sistemas domóticos con la instalación de grifos inteligentes que administren la cantidad de agua que sale y a qué temperatura. La domótica es útil para controlar muchos elementos de una casa que dejan ahorrar agua, luz o bien gas pues podemos programar los aparatos a fin de que funcionen solo durante el tiempo preciso. El hecho de que mida y advierta funcionamientos incorrectos, permite corregir pautas de conducta, al disponer de información objetiva. Las viviendas unifamiliares apartadas en parcela, por poner un ejemplo, consumen más energía (hasta el doble), en comparación con una residencia individual en un edificio residencial.
Mientras que, deberían permanecer cerradas el resto del tiempo para sostener la temperatura del interior de la vivienda. Ahorrar luz en casa es solo una de las maneras en la que la domótica nos hace la vida más fácil. Se calcula que la domótica permite un ahorro energético de entre un veinticinco por cien y un treinta por cien de media en una vivienda.
Controla y automatiza los sistemas de iluminación, climatización, agua caliente sanitaria, riego y también, incluso, el funcionamiento de los electrodomésticos y el movimiento de las persianas. Merced a la domótica y a los sistemas de monitorización, el usuario tiene la capacidad de controlar a distancia, bien sea desde un ordenador, una tablet o bien desde el mismo móvil (móvil inteligente), el instante en que queremos activar o bien desactivar los electrodomésticos. Pero no solo eso, si no que la domótica también alerta en el momento en que se supere el límite de consumo energético ya preestablecido. Aun, esta clase de sistema decide qué aparatos han de ser desconectados o bien apagados para poder conseguir un máximo ahorro de energía en el hogar. El Gira HomeServer registra y guarda de forma continua los datos de funcionamiento y consumo para la corriente, el agua, el gas o el gasóleo.
Los sensores de temperatura y los actuadores instalados en las válvulas de la calefacción permiten que el sistema advierta si la temperatura de suministro es demasiado alta o bien baja. Dicha temperatura se puede amoldar en función de la temperatura exterior media. De este modo, el Vira HomeServer asegura todo el año un empleo energético perfecto en la edificación, a la vez que se evitan gastos innecesarios. Y os damos un ejemplo de cuánto ahorra la domótica, aplicado a una vivienda estándar de ciento treinta m de Guadalajara, habitada por tres personas, con una potencia contratada de 5,7 KW, un consumo anual de cuatro mil quinientos Kw y un coste de 550 euros. Su distribución energética es un treinta y nueve por cien en calefacción, un veintisiete por ciento en agua caliente, un doce por ciento en electrodomésticos, 11 por ciento en cocina, 9 por ciento en iluminación y un 2 por ciento en aire acondicionado.